Hostales en Riga
9 Hostales y otros alojamientos en Riga, LetoniaAcerca de Riga
Riga, a veces llamada el “Berlín báltico”, ha experimentado un despertar cultural gracias al auge de su escena artística, musical y nocturna. La nueva cocina nórdica convive con los restaurantes tradicionales, donde se sirven tortitas de patata o pan de centeno, ¡y también encontrarás cervecerías artesanales en recónditos locales subterráneos! Por otra parte, su centro histórico (declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco) mantiene su eterno encanto con un laberinto de calles adoquinadas y coloridas fachadas, salpicadas de capiteles góticos y llamativa arquitectura art nouveau.
Los hostels de Riga son acogedores, aunque algunos son un tanto atípicos. Puedes alojarte en un clásico edificio de estilo art nouveau de 1905 o en un establo de caballos que data del siglo XIX. También existe un hostel en Riga que es saludable, fomenta el yoga y ofrece un desayuno vegetariano gratuito cada día. En época de nieve, muchos hostels invitan a los huéspedes a participar en actividades propias de invierno, como el bobsled o paseos en trineos tirados por huskies. La cerveza es una bebida muy común en este país báltico, por lo que, llueva, nieve o haga calor, es habitual encontrar un hostel en Riga que organice rutas por los pubs locales o sesiones nocturnas de cata de cerveza local.
El centro histórico de Riga concentra toda la acción: está a un paseo de las atracciones principales y repleta de bares tradicionales y cafeterías cosmopolitas. Cruzando el río Daugava se encuentra el tranquilo barrio de Āgenskalns, con casas que datan siglo XIX. Recorre el mercado de los sábados para descubrir el pescado ahumado y los pasteles de cereza que venden en los puestos locales. Justo al norte del centro está el barrio de Mežaparks ("parque del bosque"): un lugar tranquilo donde puedes descansar a orillas del lago Ķīšezers.
Para conocer Riga a fondo, lo mejor es apuntarse a una de las visitas guiadas a pie gratuitas. Las fachadas de estilo art nouveau de la calle Elizabetes están decoradas con dragones en piedra labrada, balcones de hierro forjado y figuras muy llamativas. Puedes contemplar los maravillosos tejados rojos de la ciudad desde el capitel de la iglesia de San Pedro (no sufras, ¡hay ascensor!). Un canal recorre el frondoso parque central, que separa la parte antigua de la nueva, donde podrás pasear por la hermosa colina del Bastión. Si te interesa el pasado soviético del país, visita el Museo de la Ocupación de Letonia.
Riga es una ciudad compacta, por lo que resulta fácil recorrerla a pie. Sin embargo, también cuenta con una extensa red de transporte público de autobuses, tranvías y trolebuses. Si llegas al Aeropuerto Internacional de Riga, sube a uno de los autobuses que te llevan al centro en una media hora. Las estaciones de autobús (Riga International Coach Terminal) y de tren (Riga Central Station) están una al lado de la otra, a 10 minutos andando de la ciudad antigua.