En cuanto llegues a Turín, la vista espectacular de los Alpes al nordeste te deslumbrará. La ciudad también es famosa por su magnífica arquitectura, con piazze elegantes y palacios suntuosos que entremezclan los estilos del Renacimiento, Barroco y art nouveau. ¿Te gustan el arte contemporáneo y la música electrónica? Estás de enhorabuena, ya que esta urbe es uno de los destinos ideales para disfrutar de ambos. Por otra parte, la oferta de vinos y gastronomía local es otro de sus grandes atractivos. ¡Se te hará la boca agua!
Los hostels en Turín son de lo más variado: desde apartamentos de dos habitaciones, perfectos para grupos pequeños, hasta grandes edificios del siglo XIX con detalles originales. Si eres amante de la naturaleza, opta por un bloque de pisos de los años sesenta con vistas al río Po o por un eco-hostel que pone su granito de arena para reducir sus propias emisiones de dióxido de carbono. Es habitual que un hostel en Turín tenga habitaciones con baño privado, y la mayoría ofrece wifi gratuito, por lo que podrás disfrutar de la ciudad y compartir las fotos de tu viaje con tus seguidores de Instagram el mismo día. Además, en algunos hostels en Turín podrás desayunar en la terraza, leer tranquilamente en el jardín o charlar con otros viajeros en el bar.
Turín se compone de varios distritos con muchos barrios. Si quieres conocer la historia y la cultura de la metrópoli, vete al centro. Allí encontrarás una arquitectura ecléctica y los principales lugares de interés, como las residencias históricas de la casa real de Saboya: el Palazzo Reale y el Madama, que albergó el primer Senado del reino italiano. En la Barriera di Milano se concentran locales contemporáneos, desde espacios creativos a bares animados, que ocupan antiguos almacenes y fábricas. Pásate también por Aurora: una zona pintoresca con mercados bulliciosos y heladerías típicas.
En Turín podrás ver y hacer un montón de cosas. La Mole Antonelliana, el museo del cine situado en el emblemático edificio de una antigua sinagoga, destaca en el horizonte con su aguja. Ve a la Piazza Castello para visitar dos de los maravillosos palacios de la ciudad y tómate un expreso de paso. ¿Las mejores vistas de la zona? Monta en el globo aerostático Turín Eye: ¡la perspectiva es fascinante desde sus 150 metros de altura! Y si te entra el hambre después de tanta aventura, déjate caer por el Mercato di Porta Palazzo, considerado el mercado gastronómico más grande de Europa.
Si aterrizas en el Aeropuerto de Turín-Caselle, toma un tren para venir a la ciudad (te llevará una hora). Desde la estación Torino Porta Nuova son solo 15 minutos andando hasta el centro. Otra opción es el taxi directo en media hora. La metrópoli invita a pasear, así que podrás hacer la mayoría de las excursiones a pie. ¿Que el trayecto es largo? Lo tienes fácil, escoge entre bus, tranvía o metro.