Las antiguas ruinas de Petra, al sur de Jordania, son los restos de la que en su día fue una elegante metrópolis de calles bulliciosas y fuentes de agua. Hoy, los visitantes se maravillan con el buen estado de este enclave arqueológico de arenisca, antes de ir a explorar el desierto o dirigirse hacia las dunas en una calesa azotada por el viento. De nuevo en la ciudad, podrás probar delicias tradicionales en sus cafeterías y restaurantes animados, como el umm ali, elaborado con pasta filo, pasas, frutos secos y leche.
La mayoría de los hostels en Petra se encuentran a poca distancia a pie del yacimiento arqueológico, y algunos cuentan con impresionantes vistas a las montañas del desierto. Puedes elegir una habitación compartida con cápsulas de madera de estilo escandinavo, o una con baño propio. Unos pocos establecimientos ofrecen lujosos extras como jardines en la azotea o descuentos para los baños turcos. Si prefieres sumergirte en la cultura local, existe en Petra un hostel donde se celebran fiestas con música beduina, té de menta y café con cardamomo.
En Petra te esperan más de 100 km² para explorar. En Wadi Musa, el asentamiento más poblado del departamento de Petra, podrás comer, beber y comprar, y está a solo 35 minutos a pie de la antigua ciudad. Al salir, te toparás con la angosta garganta Siq, que tiene una longitud de 1,2 km. Más al norte se encuentra Siq al-Barid, la Pequeña Petra. Este tranquilo enclave arqueológico asombra por sus fachadas esculpidas y vistas impresionantes de la urbe y de las montañas.
Como no podía ser menos, la antigua ciudad de Petra es el principal atractivo de la zona. Verás desde santuarios a establos tallados y esculpidos en la roca que datan del siglo III a. C. Dentro de la metrópoli hay otro yacimiento famoso, el templo de Al-Jazneh, también conocido como El Tesoro de Petra. Cuenta la leyenda que en él se encuentra escondido un tesoro faraónico. ¿Quién sabe? ¡Puede que lo encuentres! Después de empaparte de la cultura local, puedes apuntarte a una caminata enérgica (si sigues con las pilas cargadas) u optar por relajarte en un baño turco.
El Aeropuerto Internacional Rey Hussein es el más cercano a Petra: está a unos 100 km, unas 2 horas por carretera. En bus desde Aqaba se tarda 2,5 horas, y desde Amán en la ruta diaria que sale de la estación sur, 4 horas. Los minibuses salen con más frecuencia. Como la población es principalmente musulmana, los viernes suelen ser el día de descanso semanal, así que quizá te cueste encontrar autobús. De todas formas, en Petra podrás desplazarte cómodamente a pie.
