Salerno, capital de la provincia homónima, es una antigua ciudad portuaria situada en la costa oeste de Italia. Su Lungomare Trieste, un elegante paseo marítimo de un kilómetro bordeado de palmeras, es ideal para tomar el sol o refrescarse con una ácida granita de limón (¡una delicia granizada típica!). En el centro, las trattorias y las pizzerías comparten espacio con hermosas iglesias medievales. Al estar bien conectada con otras zonas del litoral, Salerno es un buen punto de partida para visitar otros lugares populares como la Costa Amalfitana y Nápoles.

Hay una gran variedad de hostels en Salerno. Puedes escoger entre un montón de pequeños bed and breakfast, que suelen estar en zonas tranquilas y tienen ese acogedor aire local. Además, hay alojamientos con vistas al mar que combinan lo clásico y lo moderno, ¡e incluso puedes quedarte en un apartamento privado a solo unos pasos de la catedral! Es normal encontrar un hostel en Salerno que cuide todos los detalles: artículos de aseo gratuitos, zapatillas para que te sientas como en casa o una máquina de café para ponerte en marcha por las mañanas. El wifi gratuito, así como el aire acondicionado y la calefacción, también es algo habitual.

Salerno se divide en dos zonas principales. En la parte oeste está el casco antiguo, con edificios históricos en distritos como Rione Duomo. Hacia el este encontrarás la estación de ferrocarril y el concurrido puerto de Salerno, los núcleos de la parte más nueva. Si te diriges al Barrio europeo, verás los restaurantes, bares y locales de música en directo que se concentran en el paseo marítimo, además del parque Mercatello. Y justo a las afueras está Vietri sul Mare, una aldea de pescadores conocida por sus cerámicas artesanales.

Salerno es hogar de importantes atracciones históricas como una majestuosa catedral del siglo X (conocida por su campanario y la rica decoración de la cripta) o el Jardín de Minerva, donde se cultivan plantas medicinales desde el siglo XI. Las espectaculares ruinas y tres grandes templos de la ciudad griega de Paestum están a solo una hora de viaje. ¡Pero no todo son piedras! Apúntate a una ruta en barco por la costa para descubrir bahías ocultas y contemplar el accidentado paisaje natural, o ve a darte un baño en una playa de arena como La Baia.

Hay autobuses directos desde el Aeropuerto de Nápoles-Capodichino a Salerno (más o menos una hora), o puedes subir a un tren en la Stazione Centrale de Nápoles (45 minutos). Desde Roma, los trenes directos más rápidos tardan alrededor de una hora. Hay ferris que conectan Salerno y destinos como Positano y Amalfi. En la ciudad, puedes moverte en autobús o tren, o utilizar el sistema de alquiler de bicis.