¿A que no sabías que Lugo es la ciudad más antigua de Galicia? Los romanos la fundaron sobre un castro celta en el año 25 a. C. con el nombre de Lucus Augusti. Dos mil años más tarde, la herencia romana sigue muy presente. Un claro ejemplo de ello es la muralla, la única del mundo que conserva todo su perímetro original, declarada Patrimonio de la Humanidad en el 2000. Esta localidad a orillas del río Miño también es un punto de partida perfecto para descubrir algunos de los tesoros de la región.
Muchos de los hostels en Lugo están en pleno centro, dentro de la zona amurallada. Como es de esperar, este es el distrito más popular de la ciudad y donde se alojan la mayoría de los visitantes. Según tus necesidades, puedes elegir entre un hostel en Lugo con habitaciones privadas u otro con habitaciones compartidas y literas tipo cápsula. Sea como fuere, ambos tienen una ubicación estupenda para explorar la ciudad a pie y sacar el máximo partido a tu estancia.
Lugo es más que la muralla romana, pero esta debería ser sin duda tu primera parada. En la Praza do Campo hay un centro de interpretación que repasa la historia de estos muros milenarios. Pasea por las calles empedradas hasta la Plaza Mayor, emplazamiento del Círculo de las Artes y otros edificios emblemáticos. Visita también la catedral de Santa María, cuya construcción combina el estilo románico y el neoclásico. ¿Quieres aprovechar las vacaciones para disfrutar del ocio nocturno? Dirígete a Praza do Campo Castelo. Aquí están los mejores bares, a menudo con música en directo.
No te vayas sin hacer alguna excursión a los alrededores, por ejemplo, al castro celta de Viladonga o al Parque Natural de Ancares. Uno de los secretos mejor guardados de la provincia de Lugo son los pequeños pueblos, como O Cebreiro, Viveiro, Mondoñedo, Belesar o Monforte de Lemos. Son ideales para conocer el estilo de vida tradicional y deleitarse con platos típicos, como el caldo gallego y el lacón con grelos. ¿Viajas en verano? Genial, porque también puedes pasar un día en la espectacular playa de las Catedrales, situada a una hora en coche.
Aunque Lugo no tenga aeropuerto propio, hay dos cercanos. El Aeropuerto de Santiago de Compostela es el más próximo, a 90 kilómetros. Desde aquí, puedes tomar un autobús que te llevará a tu destino. El Aeropuerto de La Coruña está más o menos a la misma distancia, pero en este caso no hay transporte directo. Para moverte con total libertad durante tu estancia, lo mejor es que alquiles un coche. ¿El único problema? ¡Tendrás que renunciar al ribeiro cuando te toque conducir!