En el estado de Colorado se encuentra Denver, una de las ciudades más soleadas de Estados Unidos. También la llaman "la ciudad a una milla de altitud" porque está exactamente a una milla (poco más de 1,6 km) sobre el nivel del mar. Es una de las urbes más grandes de la región, y las montañas que la rodean son un festival de hermosos paisajes, rutas de senderismo y vistas que te dejarán sin aliento. También es perfecta para los aficionados al deporte, con un montón de equipos y de estadios que visitar, por no hablar de los numerosos centros de deportes invernales.
Muchos de los hostels en Denver disfrutan de una ubicación muy céntrica, ideal si no quieres pasar mucho tiempo usando el transporte público. ¿Te gustaría alojarte en una mansión de más de 800 metros cuadrados con un jacuzzi enorme y una peculiar decoración de estilo retro? Pues aquí puedes, ¡y sin salirte de tu presupuesto! Aunque quizá prefieras quedarte en un hostel de Denver que tiene happy hour todas las noches (con bebidas gratuitas para los huéspedes) y está emplazado sobre un histórico local de conciertos en el centro de la ciudad.
Si quieres aprovechar a tope la marcha nocturna, elige un alojamiento en el centro, donde encontrarás desde bares poco convencionales hasta discotecas fastuosas, pasando por locales de música en directo. El barrio de Capitol Hill es la zona bohemia por excelencia, con llamativas mansiones señoriales, tiendas vintage, cafeterías y ambiente hippy. ¿Eres más de estar al aire libre? Entonces te encantará el área que rodea City Park, perfecta para disfrutar de la naturaleza en medio del bullicio de la ciudad.
Denver es un sitio perfecto para practicar deportes al aire libre, como senderismo, ciclismo de montaña y esquí, o para deslizarte sobre la nieve con un trineo. Los días de sol no te pierdas el jardín botánico. ¿Prefieres actividades de interior? La ciudad también puede presumir de sus fascinantes museos. Por mencionar solo algunos, puedes visitar el Museo de Arte, el Museo Kirkland de Bellas Artes y Artes Decorativas y el de Naturaleza y Ciencia.
Moverse por Denver sin coche es muy fácil, ya que los principales puntos de interés están muy cerca unos de otros. Para ir a lugares más alejados, usa el tren ligero. Si quieres salir de la ciudad para ir a las Montañas Rocosas, por ejemplo, lo más cómodo es alquilar un coche.
