Colonia es una ciudad sorprendente, con su arquitectura gótica y su merecida reputación como centro cultural de Alemania occidental. El Rin atraviesa su centro, por lo que hay muchos puntos junto al río donde pasar un buen rato. Disfrutarás de un montón de parques, jardines, teatros y cervecerías, y fotografiarás majestuosos edificios. No te olvides de visitar el museo del chocolate (¡tus sueños de la infancia se harán realidad!).
La mayoría de los hostels en Colonia están junto al Rin y algunos son una verdadera maravilla. Existe un establecimiento con una cama con dosel (¡increíble!), mientras que otros disponen de solárium, piscina o cafetería donde tomarte un buen café y un trozo de tarta al atardecer. Muchos de los hostels en Colonia tienen bar, el sitio perfecto donde conocer a nuevos compañeros de viaje. En todos tendrás wifi gratuito, ¡pero esto no es motivo para no relacionarte con los demás huéspedes! ¿Vas justo de presupuesto? Encuentra un hostel en Colonia con desayuno incluido y cocina común para preparar tus propias comidas. Además, podrás escoger entre habitaciones compartidas equipadas con todo lo necesario y otras privadas con baño propio.
Para estar cerca de la catedral de Colonia y el casco antiguo, reserva una cama en Kapitolviertel. Por cierto, ¡también estarás cerca de la marcha nocturna! Y ya que estás en el corazón de la ciudad, busca los duendes de Colonia y los mercados de artesanía. Tendrás el Rin y la estación de tren a pocos pasos. Si prefieres lugares algo más baratos donde comer, y pubs y discotecas más tradicionales, alójate en la periferia (aún en el oeste), en Ehrenfeld. O puedes instalarte al este del río, en Deutz. Si tomas el funicular, disfrutarás de vistas panorámicas. Entre esta zona y el río, está el Rheinboulevard, donde podrás dar apacibles paseos al atardecer.
Ya habremos mencionado la catedral alguna vez, pero es que es una verdadera obra maestra del Gótico y un icono de Colonia. En el centro histórico encontrarás casas de color pastel y podrás perderte por sus calles y pararte a tomar una cerveza Kölsch, ¡o dos! ¿Quieres ver la ciudad desde un ángulo diferente? Da un paseo en barco por el Rin, o limítate a ver la gente pasar desde sus orillas o en el Rheinboulevard. ¡Y qué decir del Schokoladen Museum! (No dejes de probar lo que te ofrecen estos expertos chocolateros).
En Colonia cuentas con todo tipo de transportes, así que tú decides. Si quieres ir a tu ritmo y hacer un poco de ejercicio, opta por moverte a pie o en bicicleta. También puedes usar tranvías, metro, autobuses, barcos y taxis. Si te decides por el tren, debes saber que el precio es diferente en trayectos cortos o largos, por lo que lo más sencillo y barato es que te hagas con un pase de día para no tener que preocuparte y poder explorar la ciudad tranquilamente. Si vienes en avión, podrás llegar fácilmente al centro de la ciudad con el S-Bahn (S13) desde el Aeropuerto de Colonia-Bonn.
