Tena, Ecuador, es la capital de la provincia de Napo y se encuentra en la región amazónica de Ecuador, a 3,5 horas de Quito, la capital del país. Llamada también San Juan de los dos ríos de Tena por estar atravesada por los ríos Tena y Pano, esta ciudad ecuatoriana no te defraudará si lo que buscas es sumergirte en la naturaleza y, a su vez, explorar el turismo de aventura. También podrás conocer mucho más sobre las comunidades indígenas amazónicas, como la comunidad kichwa y huaorani. Si te preguntas dónde puedes hospedarte, te gustará saber que el alojamiento en Tena se adapta a todos los gustos y bolsillos. Encontrarás hostales en Tena, Ecuador, en una montaña o con un jardín en la jungla. La mayoría de los hostels en Tena tienen espacios comunes ideales para hacer nuevas amistades, como cocina, zona para barbacoas y hamacas. Además, no te resultará difícil encontrar un hermoso hostel con wifi en Tena por si tienes alguna reunión de trabajo o quieres ponerte al día con tus seres queridos. La ciudad de Tena se caracteriza por el cuidado y la preservación de su flora y fauna, así que ir al Parque Amazónico La Isla es una visita obligada si te interesa saber más sobre educación ambiental. Para pasar el día, echar un vistazo al muestrario del ecosistema amazónico que ofrece este parque es una muy buena opción. También puedes visitar la estación biológica Jatún Sacha así como la cascada de Latas y Umbuni, con aguas cristalinas y cavernas que cautivan a visitantes y locales por igual. Las comunidades indígenas son muy importantes en Tena y puedes visitarlas si buscas deleitarte con sus comidas y vestimentas típicas mientras disfrutas de danzas nativas y música amazónica. Por otro lado, si eres una persona aventurera, esta ciudad ecuatoriana no te defraudará, y es que aquí podrás practicar deportes como rafting, senderismo, tubing y barranquismo. Durante la noche, Tena se enciende con sus discotecas y bares de karaoke. ¡No te pierdas La Gallera, la discoteca más conocida de la ciudad! Para llegar a Tena, Ecuador, lo mejor es volar a Quito y, desde allí, tomar un autobús o viajar en coche. Una vez en tu destino, la mejor opción es contar con un coche de alquiler para poder recorrer todo a tu ritmo, pero no olvides empacar un par de zapatos cómodos, ya que hay mucho para hacer a pie.